Tarta de queso Fit

Sin duda, dentro de todos los postres y tartas del mundo, mi debilidad es la tarta de queso. Allí donde me la ofrezcan, no me puedo resistir (puede ser genético, pues al papi le pasa lo mismo).

Esta claro que normalmente es una tarta bien cargada sobre todo de azúcar; y de grasa dependiendo del queso que se haya utilizado (incluso algunas recetas suelen llevar nata). 

Creerme que si esta tarta de queso fit (ligera) no estuviera a la altura de las demás, no la subiría. Pero el resultado es delicioso y no tiene mucho que envidiar a las otras.

En mi caso me ha quedado un poco baja debido a que he utilizado la mitad de los ingredientes que os pongo mas abajo, y el molde debería haber sido mas pequeño para que quedara mas alta. De todas maneras, esta riquísima. 

INGREDIENTES

Ingredientes para la base:

▪️ 150 g de harina de avena sabor Cookies. En el caso de no tenerla se puede sustituir por cualquier otra harina (maiz, trigo, espelta, avena neutra) añadiéndola canela

▪️ 30 ml de aceite de girasol

▪️1 huevo

▪️25 ml de leche semidesnatada o bebida vegetal 

Ingredientes para el relleno:

▪️450g de queso fresco batido

▪️ 1 huevo

▪️ 30g de harina de avena sabor tarta de queso. En el caso de no tenerla se puede sustituir por maizena

▪️ 150g de queso de untar bajo en grasa

▪️ Edulcorante o saborizante al gusto, en mi caso stevia.

ELABORACIÓN

1. Comenzamos preparando la base de la tarta, para ello ponemos todos los ingredientes en un bol y los mezclamos bien. Amasamos con las manos hasta que veamos que todos los ingredientes se hayan integrado. 

2. Extendemos la masa sobre el fondo del molde que vayamos a usar y la dejamos uniforme. Horneamos a 160 grados durante 10 minutos, para que quede ligeramente crujiente.  

3. Mientras la base está en el horno, preparamos el relleno. Colocamos todos los ingredientes en el baso de la batidora y trituramos hasta que todo quede bien mezclado.

4. Vertemos la mezcla del relleno sobre la base ya horneada y volvemos a introducir en el horno a 160 grados durante unos 40 minutos (depende del grosor que la vayamos a dar, tardara mas o menos). Cuando vaya quedando poco tiempo es recomendable pinchar con un cuchillo y cuando salga limpio, la tarta estaría lista.

5. Dejamos enfriar y conservamos en el frigorífico unas horas.

6. Servimos con mermelada casera por encima, en mi caso era de mora pero puede valer cualquier otra (fresa, frambuesa, arándano, melocotón, albaricoque...)

No puede ser mas sencilla de preparar, como veis no tiene ninguna dificultad. Y el resultado es delicioso, creerme y probarla.

Naomi Hernández Rodríguez   Dietista-Nutricionista

Colegiada CYL00110